Cuando estás a mi lado,
hay una melodía que vislumbra osadía.
Una melodía que no tiene permiso
ni derechos concedidos,
pero que no se marcha cuando te vas.
Una melodía que consigue hacerme volar
por el infinito para recoger el fruto de tus besos,
sin dármelos, sin concedérmelos.
Una noche más, una nueva oportunidad
para llegar a la luna, descalza y de puntillas,
para alcanzarla y robar el resplandor
que la hace mágica.
Y es que por ti,
esta noche enloquecería entre tus sabanas
aun sabiendo que no soy lo que querías.
Y es que por ti,
esta noche mi melodía vislumbra osadía,
en este viaje sin origen que es la vida,
encontrarte fue mi destino.
Cuando estás a mi lado,
hay una melodía que vislumbra osadía.
Una melodía que no tiene permiso
ni derechos concedidos,
pero que no se marcha cuando te vas.
Cualquier noche de mi vida... canta la melodía.
